viernes, 12 de septiembre de 2025

Elizabeth Siddall. Tus fuertes brazos alrededor, amor...

Tus fuertes brazos alrededor, amor,
mi cabeza sobre tu pecho,
susurras palabras de aliento,
pero mi alma no halla consuelo.
   
Pues no soy más que una cosa
asustada, y nunca seré nada
salvo un pájaro de ala rota
que debe alejarse de ti.
   
No puedo darte el amor
que hace mucho tiempo te di,
el amor que se volvió y me derribó 
en medio de la cegadora nieve.
   
Solo puedo ofrecer un corazón endeble,
unos ojos cansados por la pena,
una boca borrosa sin sonrisa
y que quizá nunca vuelva a reír. 
   
Pero sigue abrazándome, amor,
hasta que duerma;
después déjame, no te despidas,
no sea que me despierte y llore. 



De "Obra completa"