Una bandada de pájaros abandona la ladera de la montaña.
Negros en la tarde primaveral, dorados a principios de verano,
se elevan sobre la lisa superficie de la laguna.
Por qué el joven se inquieta de repente,
por qué decae la atención de su pareja?
Su corazón ya no está del todo dividido; intenta pensar
en cómo decir esto con cierta compasión.
Ahora oímos las voces de los demás al cruzar la biblioteca
hacia la veranda, la galería de verano; los vemos
sentarse como siempre en las diversas hamacas y sillas,
las blancas sillas de madera de la vieja casa, mientras recolocan
los cojines de rayas.
Importa acaso a dónde van los pájaros? Importa acaso
de qué especie son?
Se marchan de aquí, de eso se trata,
primero sus cuerpos, luego sus tristes gritos.
Y, desde ese momento, dejan de existir para nosotros.
Debes empezar a pensar en nuestra pasión de esa manera.
Cada beso fue real, después
cada beso abandonó la faz de la tierra.
De "Meadowlands"