Qué es lo que olvidé?
Dios mío, qué he olvidado?
Las almas-aves, que vuelan
Desde mí cuando duermo,
Nunca regresan las mismas
Al nido que soy,
O quizá yo
No estoy nunca segura
De ser la misma,
Dominada siempre por la sensación
De que olvidé algo,
De que perdí algo
De la hilera sin fin de existencias
Que calculaba
Según el número de aves.
De "Estrella predadora"
En el libro "Un arcángel manchado de hollín"